(Saga Symphonic) Capítulo 3: The Beginning Of The End

La muerte de Mary Thompson no había sido suficiente para causar el juicio, la chica tenía un pasado muy oscuro como para tener los requisitos. Pero sin embargo había sumido la ciudad en un terrible caos. Las calles estaban pobladas de Llorones, castigadores crónicos, bestias enormes y peligrosas, y 3 gigantes que se paseaban por las calles causando estragos. La ciudad sería destruída pronto si nadie hacía algo.



Keithan estaba muy herido y apenas podía moverse, esa extraña persona le había estrellado contra todas las paredes. Gustav entró en la estancia y ordenó que parase al atacante. Para después ponerse ante Keithan que estaba tumbado en el suelo y decirle las instrucciones.

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Jose subió al despacho más alto del edificio donde le esperaba su jefe. Lloide era el jefe de Purge en la ciudad, pero no el alto mando, había mucha gente por encima de él. En el despacho estaban los 2 mejores soldados después de

Jose, Akaeron, maestro en trampas y artillería pesada, y Pantommind, que tenía un traje capaz de hacerle invisible. Lloide empezó a dar las instrucciones:

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Mientras tanto, en la base de Aimed, Ainger, lider de Aimed, y quien reclutó a Arisato, daba sus instrucciones.

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Dorian mientras tanto, tenía otra misión auto-asignada, atrapar a "The Timeless", iba a ir totalmente solo a esa misión casi suicida de infiltración en el edificio de los seguidores del juicio, pero Nehemias se ofreció a acompañarle. Mientras tanto, Etsuko y Lemm estaban bajo el cuidado y protección de Aimed. Y así fue como se asignaron las misiones en estos caóticos momentos.

Mapa general de Symphonic:

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Mapa con situación de gigantes y algunos detalles menos importantes como la casa de Dorian:

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Keithan había recibido una orden clara, aun no sabía nada de ese tipo, pero no le dio mas importancia.

Tras recuperarse fue rápidamente a la Base de Aimed, que no quedaba lejos, una vez en la puerta, simplemente observó la escena para luego seguir con su misión sin mas preámbulos.

Sinnes salio de la habitación, había recibido la misión en su celular, avanzo lentamente hasta el cuarto de la central, donde estaba Arisato sentado junto a su jefe.
-Buenos días señor -Hizo un saludo militar y se quedo firme observando a Arisato- El es mi compañero? Ya lo conocía...pero sabia que trabajara para nosotros...Por cierto...¿Cree poder darle esto a nuestros ingenieros?
Sinnes le tendió a su general lo que le había retirado al arma de Punisher y se ajusto el cinturón.
-Un hacha me gustaría, ademas que tuviera un mecanismo interno formado con una serie de imanes para poder disparar mis balas sin tener que guardar el arma...se me comprende, señor?

El Jefe de Aimed asintió y mandó a su ayudante a recoger el artilugio. Después mandó marchar a los elegidos de la misión.

No te preocupes, Sinnes, tendrás tu artilugio cuando vuelvas de la misión. Ahora marchad, y tened mucho cuidado. Tomaos los preparativos necesarios. Suerte.

Sinnes asintió y abandono la habitación corriendo, pero se vio obligado a detenerse en el ascensor para esperar a Arisato.

*El nuevo lugar ya me había dado la bienvenida, aunque no fue una muy calurosa ni nada por el estilo, tiempo era lo que menos teníamos, y pude darme cuenta mientras era transportado al cuartel general, lo que sucedió en el Concierto apenas era la punta del iceberg, las calles se encontraban llenas de esas cosas que lloraban y otras criaturas, la gente huía sin saber que hacer, todo era un Caos...
La voz del jefe me había despertado de aquellos recuerdos, el objetivo de la misión no parecía algo difícil, pero la fábrica no me traía buenos recuerdos, aunque no esperaba encontrarme con enemigos, la última vez no había encontrado nada excepto esa máquina que estuvo a punto de acabar con la vida de Etsuko y la mía. Asentí a las palabras de Ainger aceptando la misión y con espada en mi espalda me levanté*

- No se preocupe, regresaremos con lo necesario, nos mantendremos en contacto por cualquier percance - *tomé la radio que había en la mesa y me despedí de Ainger, salí y de una máquina expendedora de refrescos saqué una bebida y pedí un mapa de la ciudad, el que doblé y guardé en mi bolsillo trasero, continué hacia el ascensor y me reencontré con Sinnes*

- Espero que no terminemos como la otra vez, jeje - *Dí un último sorbo a mi bebida y mantuve en mis manos la lata, pensaba botarla en un basurero del piso de abajo*

- ¿Quién va a conducir? ¿tú o yo? - *Sonreí mientras esperaba a que Sinnes presionara el botón para bajar al piso que tuvieramos que bajar*

El muchacho presiono el botón con la S. Las puertas se cerraron y comenzó a bajar.
-Pues...Conduce tu, así si necesitamos hacer Drive By no incendiaremos el carro y lo haremos explotar como...pues, aquel videojuego sandbox
El ascensor de detuvo con un ''Tin'', un sonido curioso bajo el estrés en el que se encontraba sumida la ciudad.
-Ahora...tomaremos esto...
Saco unas llaves de su pantalón y una blindada 4x4 encendió sus luces en la tenue oscuridad del sótano. Corrió hacia el vehículo y como un niño que se reúne con su mascota, se subió al puesto de copiloto.
-Vamos, la fabrica no estará ahí para siempre.

*Llegamos al Subterráneo y boté la lata de bebida en un basurero cercano, y luego recibí las llaves de Slaifir y observé el vehículo*

- con esto no me debo ni preocupar de los abollones - *sonreí y tomé asiento mientras sacaba el mapa y se lo entregaba a Slaifir*

- escoge camino, y yo lo sigo - *luego me coloqué el cinturón de seguridad y encendí el vehículo*

- mejor que te pongas el cinturón de seguridad colega - *dije mientras presionaba el acelerador y salía del edificio para ver la destrucción en que ahora se encontraba sumida la ciudad*

Sinnes se coloco el cinturon con cara de ''Not bad'' y trazo la ruta que esquivaba el gigante.
-Ahí tienes, dale con lo que tengas -w-
Tras esto saco las balas y comenzó a hacer malabares con los dedos.

Al poco el vehículo se estacionó en una calle en las afueras de los suburbios, aparcar dentro era regalar a los ladrones de la barriada el coche, mínimo, la gran mayoría de piezas.

Sinnes y Arisato caminaron por las calles que este último ya había recorrido una vez... en el principio de esta historia hacía ya una semana. Aún estaban las manchas de sangre donde murió el tipo que le advirtió que no fuese a la fábrica, sumado a la niebla y que empezó a chispear, el recuerdo revivió con mucha fuerza en la mente del chico.

No tardaron en encontrarse ante... la puerta de la Fábrica.

*logre salir del estadio con un grupo de supervivientes del estadio, me separe del resto del grupo cuando pasabamos cerca del hospital Lux por la parte trasera*

Laine: Otra vez solo...

*Miro a mi alrededor el desastre ocasionado en la ciudad mientras avanzo por las arrasadas calles en direccion al orfanato lanza en mano preparado para lo que me pudiera encontrar, *

Keithan entró en la base de Aimed y buscó a Lemm y a Etsuko, el sitio era grande, tal vez preguntó a alguien, para orientarse.

(Puesto que el Game Master ha pasado de postear diciendo lo que me encuentro.)

*Despues de los eventos ocasionados en el Estadio Rhapsody y de avisar a los familares de los fans supervivientes que sus hijos estaban en la cafeteria del estadio; fui a la sala donde estaba lemm durmiendo, lo cual me hizo sentir un alivio que no sentia desde los dias en el orfanato, me despedi y me fui a la ver a Etsuko, que estaba en la habitacion al frente de Lemm*
-Puedo pasar? si no te molesta...-

Miles de soldados salieron al paso de Keithan, y empezaron a disparar en cuanto advirtieron de su presencia. Muchísimos disparos o hirieron al chico o hicieron diana claramente. Keithan moriría si no huía de ahí inmediatamente.

El estado de salud de Keithan pasa a Grave.

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Laine llegó a las puertas del Orfanato, nada especial parecía haber allí.

Keithan salió de allí tan rápido como pudo, pero le pilló muy de sorpresa, así que salió mal parado, como pudo, se dirigió al estadio, pues su mentalidad le impedía ir a un hospital, allí ya no había tanto revuelo, las sombras no se atrevían a acercarsele, así que descansó tranquilo en el camerino.

Cuando hubo descansado un poco, aprovechó para sellar la habitación con hielo completamente, para evitar molestias.

-Así que... aquí es...Me parece conocido...Nah, solo mi imaginación
Sinnes se coloco los visores y se introdujo las manos en los bolsillos para luego entrar a la fabrica calmadamente
-Ahora veamos que hay dentro...

*Detuve el vehículo frente a la Fábrica abandonada, el lugar me traía recuerdos de la antigua visita, cuando me encontré con Etsuko, lo cual me había ayudado a encontrar el arma que ahora portaba, pero aún así, hubiera deseado que nada de esto hubiera ocurrido, el maldito juicio y estas porquerías*

- no entiendo que le ven a un mundo donde chicos con superpoderes sobrevivirían - *dije mientras bajaba del Vehículo y tomaba mi espada, cerré la puerta del vehículo y me acerqué a Sinnes*

- Con cuidado Sinnes, no recuerdo que hubieran criaturas, pero debemos estar alerta - *no recordaba más enemigos, aparte de esa máquina maniquí araña que ya había derrotado, de todas maneras, debíamos tener cuidado*

*me acerco a las puertas del orfanato con intencion de abrirlas,cuando pongo mi mano sobre la puerta de repente un ladrido a mi derecha llama mi atencion
dirijo mi mirada hacia el, puedo ver un perro como de unos 3 meses, blanco con aspecto de callejero, aun asi me produce una calida sensacion el hecho de verlo, creo conocer a ese perro pero no recuerdo de que exactamente de repente el perro se da la vuelta u sale corriendo hacia la parte trasera del orfanato, algo me impulsa a seguirle*

Laine:¡Eh! Miky regresa... ¿Miky? ¿por que se hasta como se llama?

*me duele un poco la cabeza al intentar recordarlo, solo corro tras el hasta llegar a un arbol algo alejado del orfanato donde lo pierdo de vista, el arbol tiene algo excrito como rayado con una piedra,a pesar de ser ilegible hace que con solo mirarlo me duela mas y mas la cabeza...*

Laine:no se por que pero debo cavar aqui... no se por que pero debo hacerlo...

*comienzo a cavar debajo del árbol*

Arisato y Sinnes entraron por la entrada que ya conocía el que ya estubo aquí una vez. Le sorprendió algo que no había visto nunca antes, el pasillo hasta la escalera para subir de planta, estaba lleno de velas de nuevo, pero esta vez toda la fábrica, TODA, estaba llena de maniquies colocados por absolutamente todo, inmóviles.

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Nehemias y Dorian llegaron hasta casi la entrada del edificio asignado, pero para su sorpresa, en el paseo lleno de jardines que había hasta la entrada, les esperaba custodiando un enorme perro negro de tres cabezas. Medía unos 3 metros, y movía la cola en el aire a espera de que alguien se atreviese a hacerle frente.

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Keithan dejó de sangrar y logró vendarse algunas heridas con trapos rotos.

Keithan pasa a estado Herido

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Laine excavó hasta encontrar una cajita, que al abrir, vió un esqueleto de perro muy pequeño. Entonces recordó... antes de ser adoptado... envenenó a su amiguito, a su cachorro.

La ira en el joven creció de manera enorme, el veneno corría por su sangre a gran velocidad. La punta de la lanza se puso verde fluorescente, y a su alrededor empezaron a salir humaredas de ese mismo color, su mayor deseo era ver el mundo envuelto en veneno.

Laine pasa a estado Maldito

-Lindo perrito- *Caeberus me ruge, no ladra...ruge* -Y Dorian cual es la estrategia?

Tras comentar el plan un poco, el Caerberus lanzó una bocanada de fuego con su boca central hacia los chicos, que esquivaron esta y se lanzaron cada uno a por una cabeza. La Cabeza Derecha no tardó en caer, un corte limpio de Kurohikari, la katana estrella de Dorian, la hizo caer al suelo como si fuese plastilina, sin ensuciarse la hoja de sangre.

*antes de salir del hospital alcance a tomar unas cuantas bolsas suficientes como hacer una espada y no veia otra mejor oportunidad de forjar una que ahora* -Bien Fido... es hora de colocarte la correa-
*estrujo las bolsas y la sangre se vuelve una espada la cual la agarro apenas se forma* -Ahora viene lo bueno!- *Me subo a la cabeza izquierda y entierro mi espada en el ojo izquierdo, para luego arremeter en el derecho dejandolo ciego...*

-Vale...si algo he aprendido...es que si hay muchos maniquís en un lugar y velas es porque algo extraño esta ocurriendo...
Sinnes siguió viendo el pasillo, le costaba menos ver en la oscuridad por el color de la transparencia del visor pero igual sus ojos deberían acostumbrarse para ver del todo

*Entramos por donde yo había entrado anteriormente en mi paso por la fábrica, a primera vista, parecía que nada había cambiado, pero... nuestro alrededor no decía lo mismo, ahora por donde vieras, había ¡¡maniquíes!!*

- joder ¿de dónde aparecieron todas estas cosas? - *Susurré mientras con cuidado caminaba por el camino formado por las velas*

- intentemos no meter mucho ruido Sinnes - *susurré a Sinnes, mientras caminaba junto a él con cuidado, de seguro podríamos despertar a esas cosas si no teníamos el debido cuidado, y con toda la fábrica llena de maniquíes, lo mejor sería caminar con la mayor cautela posible*

En ausencia de NeoFarenheit, el nuevo game master sera Slaifir

El Cerberus tiro hacia atras la cabeza con mucha violencia, emanando sangre a chorros enormes y tumbando a Nehemias contra la pared. La cabeza cortada por Dorian se desintegro como arena llevada por el viento y en el cuello rojizo dos bolas desagradables, como formadas por un pus sangriento y vomitivo, comenzaron a sobresalir. La ultima cabeza, sumida en ira total lanzo un gran gruñido y se abalanzo sobre Dorian con las fauces abiertas.

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Las velas brillaban sobrenaturalmente, los dos agentes de Aimed avanzaban sigilosamente ante los escalifriantes maniquis, parte de ellos estaban demacrados, con mitad de la cara quemada, sin ojos o con las extremidades arrancadas, dejando astillas en su lugar como si se tratase de seres humanos.
Un llamado pajaro cucu sono al fondo, al unisono con el retumbante motor de una maquina de carbon. Sobresaltando a Sinnes y Arisato. Los muchachos tenian dos alternativas, las escaleras o el deposito.